Los 7 Químicos más Importantes de la Historia
La química es la rama de la ciencia que estudia la composición y las propiedades de la materia y de las transformaciones que esta experimenta sin que se alteren los elementos que la forman.
Hoy vamos a presentarte el listado de personas que dedicaron su vida a la investigación de esta ciencia para poder lograr avances significativos que aportaron grandes avances a nuestra vida cotidiana.
Numero 7 
John dalton (Eaglesfield, Gran Bretaña, 1766 – Manchester, 1844)
Químico y físico británico al que se debe la primera formulación moderna de la teoría atómica.
Teoría atómica
Su contribución más importante a la ciencia fue su teoría de que la materia está compuesta por átomos de diferentes masas que se combinan en proporciones sencillas para formar compuestos. Esta teoría, que formuló por primera vez en 1803, es la piedra angular de la ciencia física moderna.
Masas atómicas
En 1808 se editó su obra Nuevo sistema de filosofía química, que incluía las masas atómicas de varios elementos conocidos en relación con la masa del hidrógeno. Llegó a su teoría atómica a través del estudio de las propiedades físicas del aire atmosférico y de otros gases.
Numero 6 
Antoine Laurent lavoisier (París, Francia, 1743 – ibídem, 1794)
Fue un químico, biólogo y economista francés. Considerado como el padre de la química moderna
Ley de conservación de la materia
Antoine Lavoisier fue el primer científico de la historia en postular y demostrar que la materia puede cambiar, pero su masa sigue siendo la misma. A través de sus experimentos, anunció correctamente que la materia ni se crea ni se destruye. Solo se transforma. Este es uno de los pilares científicos más sólidos que existen.
Tratado elemental de química
Publicado en 1789, “Tratado elemental de química” es un libro de Antoine Lavoisier que marca, sin lugar a dudas, un punto de inflexión en la historia de la Química. A lo largo de 580 páginas, Lavoisier establece los fundamentos de esta ciencia, hablando sobre los elementos químicos y su naturaleza y estableciendo las teorías que marcarían el futuro de la Química.
La nomenclatura química
Lavoisier asentó los fundamentos de la química moderna incorporando lo que se conoció como “tabla de sustancias simples”, aquellas que no pueden dividirse en otras más simples y que sería la precursora de la tabla periódica de los elementos químicos que todos conocemos.
La combustión y la respiración
Una de las principales contribuciones de Lavoisier fue comprender la naturaleza química de la combustión y de la respiración animal, analizando el papel que jugaban los gases como el oxígeno y el dióxido de carbono (que él llamó ácido cálcico) en ellas.
Contribución al sistema métrico
Antoine Lavoisier fue también uno de los científicos franceses que crearon un sistema métrico de medición para así asegurar la universalidad y uniformidad de todos los pesos y medidas que se realizaban en Francia.
Número 5 
Dimitri Mendeléyev (Tobolsk 1834 – San Petersburgo 1907 )
Fue un químico ruso, conocido por haber descubierto el patrón subyacente en lo que ahora se conoce como la tabla periódica de los elementos.
La tabla periódica de los elementos.
La ordenación de los elementos químicos en una tabla periódica fue el gran aporte de Mendeleyév a la Ciencia, pues esta agrupación por pesos atómicos y valencias permite observar una regularidad en las propiedades de los elementos. Mendeléyev se percató además de que una vez ordenados los elementos quedaban tres huecos sin ocupar. Convencido de que su idea era correcta postuló que los huecos correspondían a elementos aún no descubiertos e incluso pronosticó sus propiedades, basándose en las que tenían los demás del mismo grupo.
Número 4 
Robert Wilhelm Bunsen (Gotinga, 1811 – Heidelberg, 1899)
Fue un químico alemán. Investigó la interacción entre la materia y la energía radiada. Descubrió el cesio y el rubidio, conjuntamente con Gustav Kirchhoff.
El volcán Hekla
En el año 1845 se produjo la erupción del volcán islandés Hekla. Fue invitado por el gobierno de ese país para realizar una expedición.
A lo largo de esta experiencia examinó la fuente termal del volcán, donde se generaba agua caliente y vapor de aire. Ahí fue capaz de identificar elementos como el hidrógeno, el sulfuro de hidrógeno y el dióxido de carbono en los gases que escapaban.
Moderno laboratorio
Bunsen aceptó varios puestos en diferentes universidades a lo largo de su carrera. En Heidelberg pudo impartir sus ideas en un laboratorio que era considerado el más moderno de Alemania.
Ahí logró realizar nuevos experimentos que le permitieron obtener nuevos metales como: el cromo, el magnesio, el aluminio, el sodio o el litio, a través de la electrólisis de sales fundidas.
El quemador Bunsen
Michael Faraday creó un quemador de gas que fue perfeccionado por Bunsen. Recibió el nombre de quemador de Bunsen y se caracterizó por tener un mechero que funciona con gas de la ciudad y la adición de oxígeno.
Este instrumento le sirvió para estudiar muchos otros elementos. Además, está presente todavía en los laboratorios científicos, aunque con una influencia cada vez menos. Algunos lo siguen usando para doblar vidrio o calentar algunos líquidos.
Número 3 
Alfred Bernhard Nobel (Estocolmo, 1833 – San Remo, 1896)
Fue un químico, ingeniero, escritor e inventor sueco, famoso principalmente por la invención de la dinamita y por crear los premios que llevan su nombre.
Nitroglicerina líquida
Volvió a Suecia donde organizó varias plantas de explosivos, basadas principalmente en la manufactura de la nitroglicerina líquida, sustancia detonante descubierta por el italiano Ascanio Sobrero en 1846.
Con sus hermanos Ludwig (1831-88) y Robert (1829-96), perfeccionó la destilación del petróleo y explotó los yacimientos rusos de Bakú.
En Heleneborg (Suecia), trabajó en una fábrica tratando de desarrollar un método seguro para manipular la nitroglicerina, después de que una explosión en 1864 falleciera su hermano y otras personas.
Dinamita
En el año 1867 redujo la volatilidad de la nitroglicerina mezclándola con un material poroso absorbente la tierra de diatomeas consiguiendo un polvo que podía ser percutido e incluso quemado al aire libre sin que explotara. La mezcla resultante solo explotaba cuando se utilizaban detonadores eléctricos o químicos. Había nacido la dinamita.
Durante 1875 inventó la gelignita, más estable y potente que la dinamita. Más adelante creó la balística, una de las primeras pólvoras sin humo. En la fecha de su fallecimiento dirigía fábricas para la elaboración de explosivos en diversas partes del mundo.
Inventos
Además de los explosivos, inventó el detonador, caucho sintético, la seda artificial y el cuero, entre otros, en total registró más de 350 patentes en varios países.
Numero 2 
Amedeo Avogadro (Turín, 1776 – ibíd, 1856)
Fue un físico y químico italiano, profesor de física de la Universidad de Turín desde 1820 hasta su muerte. Formuló la llamada ley de Avogadro
La ley de Avogadro
El científico Amedeo propuso un método para determinar, de manera fácil y sencilla, las masas pertenecientes a las moléculas de los cuerpos que pueden pasar al estado gaseoso y el número referente de dichas moléculas en las combinaciones.
Dicho método consiste en que, si volúmenes iguales de gases contienen un igual número de partículas, la relación que hay entre las densidades de dichos gases debe ser igual a la relación que existe entre las masas de esas partículas.
Esta hipótesis también fue utilizada por Avogadro para determinar el número de moléculas que forman los distintos compuestos.
Una de las particularidades de las que se percató Amedeo era que los resultados de su teoría estaban en contradicción con las conclusiones a las que había llegado el científico Dalton, teniendo en cuenta sus reglas de máxima simplicidad.
Avogadro estableció que esas reglas estaban fundamentadas en suposiciones de carácter arbitrario, por lo que se debían reemplazar por sus propias conclusiones mediante el cálculo de los pesos atómicos.
Gases ideales
Esta teoría de Avogadro forma parte del conjunto de leyes referentes y aplicables a los gases ideales, los cuales consisten en un tipo de gas compuesto por un conjunto de partículas puntuales que se desplazan de forma aleatoria y que no interactúan entre sí.
Por ejemplo, Amedeo aplicó esta hipótesis en el cloruro de hidrógeno, en el agua y en el amoníaco. En el caso del cloruro de hidrógeno, se pudo comprobar que un volumen de hidrógeno reacciona al ponerse en contacto con un volumen de dicloro, dando como resultado dos volúmenes de cloruro de hidrógeno.
Aclaratoria en cuanto a moléculas y átomos
En aquella época no existía una distinción clara entre las palabras “átomo” y “molécula”. De hecho, uno de los científicos admirados por Avogadro, Dalton, tendía a confundir dichos conceptos.
La razón de la confusión de ambos términos se debía a que Dalton consideraba que los elementos gaseosos como el oxígeno y el hidrógeno formaban parte de los átomos simples, lo que contradecía la teoría de algunos experimentos de Gay-Lussac.
Amedeo Avogadro logró clarificar esta confusión, puesto que implementó la noción de que estos gases están conformados por moléculas que poseen un par de átomos. Mediante la ley de Avogadro se puede determinar el peso relativo a los átomos y las moléculas, lo que implicaba su diferenciación.
A pesar de que esta hipótesis implicaba un gran descubrimiento, esta fue pasada por alto por la comunidad científica hasta 1858, con la llegada de las pruebas de Cannizzaro.
Gracias a la ley de Avogadro se pudo introducir el concepto del “mol”, el cual consiste en la masa en gramos que es igual al peso molecular. Al número de moléculas contenidas en un mol se le denominó número de Avogadro, el cual es 6,03214179 x 1023 mol.l-1, siendo este número el más exacto en la actualidad.
Numero 1 
Jöns Jacob Berzelius (Östergötland, 1779 – Estocolmo, 1848)
Fue un químico sueco. Ideó el moderno sistema de notación química, y junto con John Dalton, Antoine Lavoisier, y Robert Boyle, es considerado el padre de la química moderna. Es reconocido por haber sido el primer analista del siglo XIX.
Ley de las proporciones definidas
Poco después de llegar a Estocolmo, escribió un libro de texto de química para sus estudiantes de medicina que fue el punto de partida de su larga y fructífera carrera.
Mientras llevaba a cabo experimentos para documentar el libro de texto utilizó la ley de las proporciones constantes, formulada por Joseph Louis Proust, y demostró que las sustancias inorgánicas están compuestas de diferentes elementos en proporciones constantes en peso.
Basándose en este hecho, en 1828, compiló una tabla de pesos atómicos relativos, donde el peso atómico del oxígeno se fijaba en 100. Este trabajo proporcionó una evidencia a favor de la teoría atómica de Dalton: que los compuestos químicos inorgánicos se componen de átomos combinados en cantidades enteras.
Al descubrir que los pesos atómicos no son múltiplos enteros del peso de hidrógeno (ejemplo: el peso del cloro es 35,5 veces el peso atómico del hidrógeno), Berzelius también refutó la hipótesis de Proust de que los elementos se construyen a partir de átomos de hidrógeno.
Nomenclatura química
Con el fin de sistematizar sus experimentos, desarrolló un sistema de notación química en la que a los elementos se les denotaba con símbolos simples. Consistía en asignar la primera letra de su nombre en latino al elemento, añadiendo una segunda letra cuando había necesidad de diferenciar dos elementos cuyo nombre comenzaba con la misma inicial. Por ejemplo, C = carbono, Ca = calcio. Además, se indicaba las proporciones por números.
Este es, básicamente, el mismo sistema utilizado en la actualidad en la fórmula molecular, con la única diferencia de que en lugar de los subíndices utilizados en la actualidad (por ejemplo, H2O), Berzelius utilizaba superíndices (H2O). Pese al gran avance que supuso frente a los anteriores sistemas, su propuesta encontró resistencia, y tardó años en ser universalmente aceptada.
Descubrimiento de nuevos elementos químicos
Se le considera el primer analista del siglo XIX porque, además de llevar a cabo con la mayor precisión un gran número de análisis, hay que atribuirle el descubrimiento del torio, el cerio y el selenio, fue el primero en aislar el silicio (1823), circonio (1824), y el titanio (1828). Además, los estudiantes que trabajaban con él en el laboratorio también descubrieron el litio en 1817 y redescubrieron el vanadio en 1830. Berzelius fue quien propuso esos nombres, así como el de sodio.
Estudió las combinaciones de azufre con fósforo, el flúor y los fluoruros, determinó un gran número de equivalentes químicos.
Acuñó nuevos términos químicos
A Berzelius también se le atribuyen nuevos términos empleados en química como catálisis, polímeros, isómero, isomería, halógeno, radical orgánico y alótropo, aunque sus definiciones originales difieren drásticamente de su uso moderno.
Gran aportación a la biología
Fue el primero en hacer la distinción entre los compuestos orgánicos (aquellos que contienen carbono), y los compuestos inorgánicos.
El término «proteína» fue propuesto por Berzelius debido a que estas moléculas parecían ser la sustancia primitiva de la alimentación animal que las plantas preparan para los herbívoros.